lunes, 20 de agosto de 2007

Transantiago: ¿ Verde y blanco? o ¿ Blanco y negro?

Jorge Núñez es un estudiante de ingeniería fanático del club deportivo Universidad de Chile. Cada fin de semana sagradamente va a alentar a su equipo, pero desde que empezó a funcionar el Transantiago se ha visto enfrentado a una rara situación, al intentar tomar la micro en el paradero de Grecia con Juan Moya, los choferes no le paran al verlo con la camiseta del equipo de sus amores. Al preguntarle al joven por su problema nos señalo que “los micreros nunca para a los de la “U”, y algunas veces para partidos importantes me tengo que ir caminando y casi siempre llego atrasado”.
Pablo Rivera un cadete de la Universidad de Chile, es más duro con el nuevo sistema de transporte, y señala que “ los micreros son súper mala onda, cuando me ven con el equipo de entrenamiento de la U no me paran, y para que decir en los días de partidos, el gobierno dijo que estos micreros iban a ser educados, pero al fin y al cabo son la misma cuestión”.
Por otro lado están los micreros quienes no quisieron identificarse por miedo de represalias de sus mismos colegas, al preguntarle por este problema, nos dijeron que esto no era efectivo, que por culpa de un par personas que no cumplen con su trabajo profesionalmente, se ven todos afectados. Pero después de mucho observar en el paradero pudimos darnos cuenta que realmente existe una discriminación hacia los hinchas de la “U”, ya que basta que se tapen su camiseta para que estos accedan a parar.
Si bien esta situación no se cumple en un %100, es bastante frecuente y afecta a mucha gente que no tiene nada que ver con el futbol, la señora Nelly Moya dueña de casa y locataria del sector, nos señalo que “ cuando juega la U ese paradero es casi inservible, hay que ir a otro lado a tomar la micro”
Al ver otros paraderos en Irarrázaval, pudimos percatarnos que no se daba esta situación, los choferes paraban sin importarle el tipo de pasajeros, les daba lo mismo si eran de la “U” o no, sólo seguían de largo cuando habían muchos hinchas y las micros corrían peligro de ser destruidas, pero por lo general seguían se trayectoria con normalidad

lunes, 13 de agosto de 2007

Transantiago: ¿Verde y blanco? o ¿Blanco y negro?

Los hinchas de la Universidad de Chile, suman una nueva traba para poder ir a alentar a su equipo todos los fines de semanas. No se trata del alto precio de las entradas, ni problemas de seguridad, ahora se ven afectados por la discriminación de los choferes del Transantiago, que al verlos con la camiseta azul, siguen de largo como si no los hubieran visto.
El hecho ocurre en el paradero de Grecia con Juan Moya, precisamente ahí consultamos a los hinchas azules, quienes manifestaron su malestar con esta situación, ya que dicen que las micros no paran y que se tienen que ir caminando al estadio, lo que les significa llegar atrasados al partido.
Jorge Núñez todos los fines de semana sagradamente intenta tomar la micro para alentar al equipo de sus amores, pero nos confiesa que le resulta casi imposible cuando se encuentra con la camiseta puesta, ya que los micreros no lo toman en cuenta. Él piensa que es un acto de discriminación, ya que en muchas oportunidades le ha tocado estar solo esperando la micro y es lo mismo, ya que podríamos entender que los choferes no paran por miedo de que les destruyan su máquina. La única solución es ponerse algo arriba de la camiseta o esperar que algún pasajero haga parar la micro justo en ese paradero.
Al consultarle a otros hinchas azules por el problema señalan que la mayor parte del tiempo ocurre esta situación, pero para ser justos no son todos lo choferes, algunos no se hacen problemas y hasta los llevan sin cobrarles.
Por otro lado están los micreros quienes al preguntarle por este problema, nos dijeron que esto no era efectivo, que por culpa de un par personas que no cumplen con su trabajo profesionalmente, se ven todos afectados. Pero después de mucho observar en el paradero pudimos darnos cuenta que realmente existe una discriminación hacia los hinchas de la “U”, ya que basta que se tapen su camiseta para que estos accedan a parar. Si bien esta situación no se de en un %100, es bastante frecuente, y no sólo incomoda a la gente del futbol, también se ven afectados los vecinos, ya que cuando necesitan tomar una micro, no pueden y muchas veces tienen que cambiarse de paradero o esperar que empiecen los partidos de la Universidad de Chile.
Al ver otros paraderos en Irarrázaval, pudimos percatarnos que no se daba esta situación, los choferes paraban sin importarle el tipo de pasajeros, les daba lo mismo si eran de la “U” o no, sólo seguían de largo cuando habían muchos hinchas y las micros corrian peligro de ser destruidas, pero por lo general seguían se trayectoria con normalidad.

martes, 7 de agosto de 2007